DIA 7//LA DINÁMICA DEL EXPRIMIDOR

Una pancarta en Badalona, dos vecinos diferentes.

De nuevo el Partido Popular exprime el jugo del extranjero. Se trata de sacarle lo que pueda. En el año 2000 ganó la mayoría absoluta, en buena medida, colocando la inmigración como un problema que ellos sólo sabrían resolver. Una vez con todo el poder de los votos, hizo entrar por las ventanas de atrás a más de 2 millones de extranjeros. Avivó con combustible humano el milagro chapado en oro de la economía española. Ahí sacó una buena cantidad de hectolitros de sudor extranjero para las arcas públicas y para el abaratamiento de los salarios. Más obreros, más baratos, más sumisos. Ahora saca de nuevo el exprimidor. Después de haber calentado durante meses en Catalunya el debate político, situando al extranjero en el centro de los ataques, ahora llega la propuesta reina: que se vayan todos . Es curioso que sólo vomite su bilis xenófoba en Catalunya, a sabiendas de que en algunas ciudades clave puede sacar partido. En Madrid el PP dice otras cosas. Habla de la inmigración como una riqueza y sus palabras parecen las palabras que siempre flotan en la Isla de Ellis, recibiendo a los pobres de la tierra. No es contradicción, es táctica. En Madrid quiere los votos de rumanos y ecuatorianos, abundantes y conservadores. En Catalunya cuenta con el voto rumano y ecuatoriano, que no simpatiza con marroquíes y pakistaníes. Y éstos últimos no votan. Pero sirven de bolsa de arena a la que machacar si se necesita ganar unos centenares de votos en un barrio olvidado, degradado y fácil presa del miedo. La pregunta del momento cuando los políticos ven a un extranjero es: ¿vota o no vota?

DIA 6//EL PARTIDO INMIGRANTE: UN MILLÓN DE VOTOS

Más allá de la cantidad precisa de extranjeros que voten, las elecciones municipales de 2011 plantean un escenario inédito para España y sugerente para el debate sobre la inmigración. El extranjero ya no será sólo objeto de debate sino también sujeto. Con un millón de votos sobre la mesa, el Partido Inmigrante ocupará un lugar distinto en las elecciones municipales de 2011 al que ocupó en la corta e intensa historia inmigratoria española desde 1985. Si hasta ahora resultaba “gratuito” en términos de votos el pronunciamiento sobre la inmigración (generalmente a cuenta del PP y de CiU), ahora los votos de los extranjeros son necesarios en unas decenas de municipios para reafirmar una ventaja, intentar dar un vuelco a las urnas o mantener las mismas diferencias. El millón de votos de la inmigración plantea una ventaja atractiva para los partidos políticos en algunos municipios y en algunos distritos, dado que aumenta sus caladeros de votos. Sin embargo, plantea una ecuación realmente complicada entre la inmigración como sujeto elector (un millón de votos en estas elecciones, aunque irán en aumento geométrico en los próximos años) y la inmigración como objeto de debate político y electoral (con un número mucho más grande de votos en juego). En otras palabras, ¿cómo lograrán los partidos ganarse el voto del ecuatoriano o del rumano al tiempo que sostienen discursos duros ante la inmigración para asegurarse el voto local? 

DIA 5// PP, INMIGRANTES Y BIPOLARIDAD

Las últimas legislativas en Estados Unidos han dejado, al menos, tres noticias: El derrumbe de Obama, la piedra del Tea Party en el zapato republicano y el alejamiento hispano de los demócratas. Los extranjeros no votan necesariamente a los partidos políticos progresistas. Al menos no deberían darlo por seguro los estrategas del PSOE.
La Comunidad de Madrid es un buen ejemplo. El PP está movilizando activamente el electorado estranjero. Dios, Familia, Propiedad, son palabras claves en el cerebro conservador y botones que disparan la simpatía de una parte importante de colectivos como rumanos, búlgaros, ecuatorianos o colombianos.
Revisen Nuevos Madrileños del PP. Escuchen las palabras de Esperanza Aguirre sobre la inmigración, riqueza de las grandes naciones. Vean la serie "Por qué soy del PP" .
Cómo combinar eso con el discurso de Alicia Sánchez Camacho en Cataluña y si esa (mala) combinación despertará la inquietud de los electores todavía es un misterio.